No tengas miedo, Emiliana,
duerme, duerme,
a descansar.

Yo te contaré una historia
que siempre recordarás.

Al comandante Guevara
no le pudieron matar.
El fuego de su mirada
brilla por la eternidad.

Al comandante Guevara
no lo podrán encerrar,
invisible y transparente
y como el aire esencial.

El comandante Guevara
no se cansa de volar.
Hoy va convertido en cóndor
entre cordillera y mar.

El comandante Guevara
no para de trabajar.
Donde la justicia es ciega
ahí lo puedes encontrar.

Al comandante Guevara
alguien lo escuchó cantar
una canción olvidada,
yo te la puedo entonar.

Composição: Angel Parra