¡Cuán hermoso eres, Señor!
Nadie es como tú
Eres eterno príncipe de paz
En ti confiaré
Desde la eternidad
Tu has sido Dios
Y por siempre señor seguirás siendo Dios

Pues tú eres por siempre Hijo de Dios
Mi corazón y mi alma por siempre confiará en ti
Mi corazón y mi alma por siempre confiará en ti

Composição: Marcos Witt